Buscando un relojito algo distinto me topé con un artículo de un periódico alemán que hacía referencia al Venedig marrón de la casa Richtenburg. Aquí podéis ver el artículo que os comento.

Se trata de una pieza muy especial, tiene un aspecto fuera de lo común, sin embargo, resulta muy elegante a la vez que atractivo. El tamaño del Richtenburg Venedig es perfecto, ni muy grande ni muy pequeño. Se trata de un modelo con mecanismo automático por lo que resulta más corpulento y alto que los de cuarzo que habitualmente llevan las mujeres.

Venedig marrón

 

Pero precisamente por eso, resulta distinto y novedoso. Tiene una preciosa esfera de nácar y una ventana que permite echar un vistazo al interior del reloj. ¡Me encanta! No dudé ni un momento en hacerme con uno y ya estoy esperando a ver la nueva colección de la casa Richtenburg, seguro que sacan cosas interesantes de las que os iré hablando en el blog.